Si el encuentro con un país diferente y mejor no acontece es porque se ha impuesto un “mainstream”, en todos los ámbitos, de un conformismo extendido y de la extracción de rentas desde el lado oscuro de las coincidencias entre quienes gobiernan, sus aliados de ocasión y, en diferentes escalas de degradación social, de las multitudes, en los mercados negros de la displicencia social. El futuro está ahí, la puerta de salida está abierta al avenir y lo tenemos en nuestras manos si logramos vivir en paz reconociendo la existencia de otro, trabajando juntos con nuestras diferencias.