Se extingue el fuego esencial de la vida académica de las universidades autónomas de Venezuela, variadas son las razones, pero las fundamentales son las siguientes: Primero, el empobrecimiento de los docentes universitarios, quienes se encuentran discriminados en términos salariales, mal pagados en comparación con el estándar mundial y bajo el impacto de una inflación estructural intensa; Segundo, por la pérdida de los incentivos para realizar estudios superiores por parte de los graduados de bachillerato. La enseñanza superior fenece ante la destrucción de su sentido existencial: maestros y alumnos necesarios para el desarrollo de la nación.