El análisis de impacto regulatorio tiene como propósito mejorar los impactos positivos que la regulación tiene sobre la economía, de manera que la política económica favorezca la eficiencia del funcionamiento de los mercados y se eviten posibles trastornos perversos colaterales.
De manera extensa los daños colaterales pueden identificarse a través de la anticipación de impactos nocivos relacionados con la salud, el bienestar de la población, la salud ambiental con el menor costo social posible. Otra fuente de trastornos regulatorios tienen su origen en las asimetrías de información de la mala política pública, ellas surgen cuando el mal diseño de la política pública otorga poder discrecional o proporciona información privilegiada que puede ser aprovechada por individualidades o por grupos de interés en su propio beneficio desviando los recursos e impidiendo el fin último de la norma o regla.
Sería crucial para la transformación y reconstrucción del país impulsar una ley orgánica que someta cualquier regulación a evaluación de impacto regulatorio, dándole a las Academias de Ciencias de Venezuela y a las Universidades Autómomas un lugar preminente para evaluación previa.
La simplificación del marco regulatorio es imprescindible si se quiere liberar a las fuerzas productivas de la asfixia regulatoria que sufren actualmente.
El inicio de esta agenda puede tener su comienzo al incluir en propuesta esta Ley Orgánica de Impacto Regulatorio de las Políticas Públicas.
http://unidadvenezuela.org/2015/10/oferta-legislativa-para-el-cambio/